martes, 2 de diciembre de 2008

Con el cerebro caliente mejor se entiende

Después de un año ya en Bcn, por fin he invertido algo de dinero en comodidad para mi persona; y no ha sido en nada escandaloso como un colchón o un edredón de plumas. Sino que ha sido un simple calentador de 19€ ... pero no veas que calentador!!!! lo contento que estoy... la verdad que me iba haciendo falta.
Ahora que mi mente puede ya estar completamente apartada del frío pero no sin dejar de mirar de reojo la bonita adquisición que me he permitido...comienzo a intentar comprender bien los libros heredados de mi antiguo morador de habitación; y digo bien porque realmente tengo en mi cuarto unos ejemplares filosófico y teológicos que realmente cuestan asimilar; y más si el moquillo te amenaza con caer cada dos por tres.
La cuestión es que he empezado ha encontrar autores que explican perfectamente ideas y paranoias que vagamente intuía que existían pero que eran dificilísimas de explica y mucho más de comprender...y ante esto sólo caber dar las gracias.
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